Los patriotas rioplatenses frente a la Europa de Viena: entre cálculos estratégicos y filosofía de la historia

This article studies the dispute between an America immersed in revolutions and a reactionary Europe. It covers the period between 1815 and 1816, marked in Europe by the Congress of Vienna and Napoleon’s return, and in Latin America by the declaration of independence in Rio de la Plata, which was the only province that had remained free from any royal reconquest. Through the contemporary press, it studies how the patriots from Plata saw and judged the events in Europe, which they interpreted as a reactionary step backwards. This view formed part of a more general interpretation of history, in which America was trying to find its place and affirm its own identity. It shows how their observations of Europe were articulated around the search for a political solution for the new state. entailed diplomatic negotiations and projects regarding the kind of regime that the province should adopt to be accepted within the «concert of nations » and achieve peace with Spain.En este trabajo se estudia la confrontación entre la América de las revoluciones y la Europa de la reacción. Abarca el contexto particular de los años 1815 y 1816, marcado por el Congreso de Viena y la vuelta de Napoleón en Europa, y la declaración de independencia en el Río de la Plata, siendo ésta la única provincia que a la sazón se ha quedado libre de toda reconquista realista. A través de la prensa, se estudia en primer lugar la visión y el juicio de los patriotas rioplatenses sobre los eventos europeos, interpretados como un retroceso hacia la reacción. Esta visión forma parte de una interpretación más general de la historia, en la cual América busca encontrar su lugar y afirmar su propia identidad. En última instancia, se muestra cómo estas observaciones hacia Europa se articulan con la búsqueda de una solución política para el nuevo Estado, que pasan por los negocios diplomáticos y proyectos en torno a la forma de régimen que el Río de la Plata debe adoptar, para estar aceptado en el «concierto de las naciones» y ganar la paz con España