Tiempo y narración en La Regenta de Clarín

Nuestro trabajo se ocupa del concepto pluridimensional del tiempo en La Regenta de Leopoldo Alas «Clarín». El tiempo es una de las categorías principales de la experiencia humana y un componente básico del texto narrativo: se ordena cronológicamente en la historia y se materializa discursivamente. Se puede afirmar que se trata de una categoría que, hasta un cierto grado, pertenece a la dimensión espacial más que a la temporal. Por este motivo, el tiempo y la narración en la novela se pueden marcar como pseudo-temporales. El concepto del tiempo en esta novela clariniana se puede percibir de dos modos principales: el tiempo lingüístico, narrativo, y el tiempo figurado, vinculado a la imagen temporal suscitada por el texto narrativo (tiempo narrado y tiempo narrante o tiempo de la historia y tiempo del discurso). El tiempo narrativo del texto recurre con preferencia a tres métodos: retrospección, anticipación e inversión. En nuestro artículo se estudian también los aspectos sintácticos de la categoría del tiempo: sucesión, orden y duración. En la novela clariniana se distinguen dos partes, de similar extensión, que coinciden con los dos volúmenes publicados (1884-85). Una parte estática y expositiva que se desarrolla durante tres días (I-XV); y otra parte activa durante unos tres años (XVI-XXX). Los rasgos estructurales y temporales de la narración nos permiten hacer hincapié en la estructura circular de la novela: todo ha pasado y nada ha cambiado. Vetusta, la estática localidad, ha dejado que se consumase en su interior la tragedia humana. De este modo, Clarín juega estratégicamente con el concepto de tiempo con la intención de trasformar a los personajes en piezas que, tras tanta lucha espiritual, han quedado inertes y petrificadas