El Congreso de Tucumán lleva en la memoria histórica la gloria de haber declarado la Independencia de las Provincias de la América del Sur, en momentos en que la revolución hispanoamericana parecía naufragar en todos sus frentes. Se instaló a las 9 de la mañana del 24 de marzo de 1816 en San Miguel de Tucumán y se disolvió en Buenos Aires el 11 de febrero de 1820. La historiografía argentina ha destacado sus valiosos aportes, pero a la vez existe la controversia sobre errores, contradicciones e incoherencias que hasta hoy mantienen una enigmática aureola en el análisis de su desarrollo histórico. ¿Cuál es el juicio histórico? ¿Cómo ha sido valorado por las generaciones sucesivas? ¿Cómo lo vemos hoy, después de 200 años?. (Párrafo extraíd...