Resistencia campesina y explotación rural en México.

La obra aborda el análisis del movimiento campesino como uno de los fenómenos más importantes en la historia de nuestro país. El estudio hace referencia a las movilizaciones de finales de la década de 1960 en el contexto del proceso de acumulación del capital en la agricultura, con el fin de escudriñar las causas estructurales de la crisis. Se centra en el debate parte de los estudios del periodo 1970-1980 por el impulso a la difusión del movimiento, de su avance orgánico y su consolidación, y privilegia el análisis del periodo 1977-1983, que la autora define con carácter defensivo. La política agraria y la respuesta oficial al movimiento se dieron en una correlación de fuerzas desfavorable frente al capital y al Estado, pero las manifestaciones y expresiones de las distintas corrientes de lucha continuaron y fueron estudiadas desde diferentes enfoques. Blanca Rubio señala que el estudio que presenta se refiere al movimiento campesino, sin pretender abordar el fenómeno global de la lucha de clases en el campo; pero sí presenta una breve reflexión de la constatación de la composición de clase en el periodo de estudio. Rescata en información hemerográfica las tendencias de cada una de las vertientes de lucha, lo cual permitió delimitar hipótesis centrales de su trabajo, complementadas a partir de información contenida en documentos de las organizaciones campesinas y de testimonios y denuncias de dirigentes y campesinos recopiladas en eventos y foros regionales y nacionales. Los capítulos III a V se refieren a los diversos tipos de lucha: de acuerdo al tipo de demanda, como fueron los casos de la lucha de la tierra, la de los productores asalariados, la de campesinos pobres, así como el movimiento de la represión, el autoritarismo y el fraude electoral. La autora dedica un capítulo para exponer los resultados de la investigación sobre las causas del movimiento como consecuencia de una transición de una fase extensiva a una intensiva, así como a la crisis de legitimidad del Estado ante los campesinos pobres que solicitan la tierra; y una reflexión acerca del parteaguas en el inicio de cambios importantes al presentarse nuevas formas de organización campesina. La idea central de este libro, son las tendencias contradictorias marcadas por el proceso de recomposición capitalista en el campo y la movilización de masas como su contraparte necesaria