Se abre una nueva oportunidad: Importando sistemas horizontales de justicia durante una época de reforma judicial.

Desde que los distintos regímenes autoritarios en América Latina llegaron a su fin, los EstadosUnidos, gobiernos europeos, agencias de ayuda internacionales, instituciones financieras multilaterales y bancos de desarrollo han entregado asistencia a varios Estados de la región en la transición hacia la democracia. En general, los programas de préstamo y ayuda se han enfocado a mejorar el acceso a la justicia y a promover el estado de derecho en dos formas distintas. La primera es a través de la reforma judicial, enfocada hacia mecanismos mediante los cuales los tribunales puedan obtener justicia de una manera independiente, justa y eficiente, ajenos a presiones politicas. Los programas en esta área se han enfocado a mejorar los presupuestos judiciales, la capacitación de jueces y otros funcionarios, de tribunales, en nuevos procedimientos, dando fluidez al manejo de casos y otras tareas administrativas judiciales. La segunda manera se relaciona con la reforma legal, redacción de nuevos modelos de códigos criminales, civiles y administrativos para su promulgación e implementación en una economía de libre mercado en desarrollo