Este artículo defiende la necesidad de una estrategia de política industrial en los países del sur de Europa para recuperar competitividad y estabilidad. Esa estrategia debe ser diferente del pasado, más sistémica, y debería incluir estrategias de innovación y vías para actualizar la educación. Debería adoptarse la competitividad del mercado nacional e internacional como motores del cambio. Deberían crear y apoyar las zonas industriales y los cluster, que podrían ser la base para la transferencia de tecnología, la inversión extranjera directa y el aprovechamiento de la globalización. Las nuevas políticas industriales deberían priorizar los sectores donde la sociedad tiene intereses a largo plazo, por ejemplo las energías alternativas o el t...