Fernando Cassinello: la construcción del paseo vertical

La obra del arquitecto almeriense Fernando Cassinello Pérez (Almería, 1928-Madrid, 1975)ha sido escasamente publicada a pesar de ser prolífica y de calidad. El desarrollo de su profesión descansa sobre tres pilares: la producción arquitectónica, la actividad académica y la inquietud investigadora. Cassinello encontró en las escaleras un elemento donde depositar el ingenio creativo y un tema sobre el que escribir e investigar, además de transferir ese conocimiento a sus propias obras de Arquitectura. Las proyectó voladas, helicoidales y semicirculares. Las construyó de acero y de hormigón, directamente en la obra o con elementos prefabricados: en todos los casos recibieron con agrado las huellas que imprime el proceso de construcción. Las moldeó escultóricas o las resolvió con una eficacia ingenieril, pero siempre hubo una reflexión estructural, constructiva y proyectual sobre lo que significa subir al hogar o bajar al jardín. Unas veces, el interés residía en la escalera propiamente dicha; otras, en la caja contenedora, donde celosías caladas, muros de hormigón o de ladrillo convertían el movimiento vertical es un sensual paseo. También las barandillas, y su contacto con la mano; o los peldaños, vinculados dimensionalmente con la huella del pie, subrayan el componente antropológico de la escalera y el interés de Cassinello por su proyecto y construcción. De ellas extrajo la estricta utilitas que la modernidad les otorgó, y supo hacer de ellas, además, un elemento del paisaje urbano; un escenario de encuentro de la colectividad; e incluso, el símbolo reconocible de una obra de arquitectura. Esta investigación recoge las principales escaleras que Fernando Cassinello proyectó y construyó. Y que, desde luego, merecen ser conocidas por quien decida hoy proyectar y construir arquitectura contemporánea