La pedagogía de la alteridad: implicaciones teóricas, investigadoras y de práctica educadora

La pregunta educativa que aún queda por resolver es que, hasta ahora, las distintas iniciativas educativas se han dirigido hacia la autodeterminación del individuo como un yo aislado de los demás, lo cual ha contribuido a una falsa calidad de vida y a una aparente integración social, porque hoy día predomina en nuestra sociedad una cultura donde el egoísmo y la ausencia de compromisos y obligaciones hacia el otro ha encerrado al individuo dentro de sí mismo, dando lugar a una profunda crisis educativa que no acierta en desentrañar hacia qué educación se deben encaminar los esfuerzos por alumbrar individuos capaces de superar las actuales dificultades. Con el tránsito de la Modernidad a la Postmodernidad, se percibe con mayor nitidez la necesidad de cultivar una ética que induzca a no dañar al otro, a la vez que una pedagogía que aspire a reconocer y hacerse responsable del otro, con el compromiso de asumir el cuidado de cada alumno en la imperiosa necesidad de que el docente testimonie con su quehacer educativo la certeza de educar en la alteridad