Fundamentalmente en Así habló Zaratustra, Nietzsche concentra su atención en la niñez y brinda aportes significativos para el desarrollo de una perspectiva que tenga, como objeto de estudio específico, el mundo de la infancia y la niñez. Frente a la reducción de la niñez (o de parte de ella) a la “minoría de edad”, pero también a despecho de las exigencias utilitaristas o ascéticas de la moral convencional, Nietzsche postula el “país de los hijos” y sueña con una “segunda inocencia”. Ésta equivale a la consumación de los ideales éticos y estéticos del superhombre. Sus aportes para una consideración de la infancia y la niñez ponen de relieve la violencia social específica contra los niños, y están indisolublemente ligados a la redefinición d...