Azorín comenzó a leer clásicos españoles a una edad muy temprana y a menudo recurrió a ellos en su trabajo periodístico durante el período en cuestión. La lista de autores y obras citados por él es extensa, aunque ciertos autores y sus opiniones destacan: Cervantes, Gracián, Saavedra Fajardo, Fray Luis de Granada, Santa Teresa, por ejemplo. A menudo se apoyaba en ellos para criticar el presente inmediato y adentrarse históricamente en los temas que le preocupaban: la decadencia de España, la oratoria, el feminismo, la defensa de España ante la opinión pública extranjera, la ética en España, el carácter del pueblo español, los valores de la nación, la tradición y el comportamiento de los extranjeros. Azorín veía en los clásicos una encarnaci...