La Palabra en su esencia divina se nos presenta en el Popol Vuh, Libro Sagrado Quiche-Maya, con toda una dimension fisologica, esgrimada en el lenguaje poctico y simbolico propio de esa cultura precolombina. Esto es plasmado en la presencia de un Dios supremo, Kabawil, mostrado a lo largo de todo proceso que sigue la creacion. Lo cual se lleca a cabo en el norte de una inteligibilidad universal, demostrada en la potencialidad de la palabra, fuerza de la razon y de la mediacion. El acto creador del Dios Supremo se funda en el poder de la palabra, razonada, pensada que se desplaza a lo largo del acto creador, concebido a traves de varios ensayos hasta lograr el ser humano perfecto, creado a imagen y semenjanza de su creador.