El derecho del consumo, en perspectiva

Resumen: La reunión de personas (al menos hasta estos tiempos y hasta que nos reemplacen las máquinas), durante algunos días y en un lugar común, para pensar sobre temas que nos convocan, siempre ha sido una herramienta útil, proteica, gratificante y saludable. La convocatoria a este Vigesimoquinto Congreso Nacional de Derecho del Consumidor, al que, por demasiada generosidad de los organizadores, se me ha invitado, será, sin dudas, una nueva oportunidad para reflexionar sobre lo que pasó, está pasando y pasará con el derecho que regula las normas del consumo. Si agregamos que la cita se realiza para rememorar los treinta años de vigencia de la ley madre de los derechos del consumidor, la importancia del evento se potencia. Y lo hace porque los números redondos son, en general, ocasión propicia para un mayor detenimiento. Son momentos más significativos, que generan mayores sensaciones y sentimientos. Y, con ello, quizás mayores compromisos. Por ello, saludo con intensidad a este Congreso, del cual, afirmo con certeza, surgirán nuevas ideas y fuerzas que marcarán el rumbo de esta novel materia, hoy centro de atención en los foros de reflexión y en la resolución de conflictos a los que abarca