En los "diálogos eróticos", especialmente el Simposio y el Fedro, Platón explicó por qué el deseo erótico puede desempeñar una función epistémica, estableciendo una fuerte conexión entre el deseo erótico y la belleza, "la más claramente visible y la más amada" (Fedro 250e1) entre las Ideas. Tomando los diálogos eróticos como trasfondo, esclareceré en este trabajo la explicación de Platón en otro contexto, el del Fedón (72e3-77a5), para discutir la función epistémica del deseo erótico en relación con el argumento de la deficiencia y el argumento de la afinidad. Mi propuesta es que el deseo erótico del filósofo se activa al reconocer vestigios de las Ideas, algo de lo que carece el mundo material, y con lo que, sin embargo, su alma está famil...