Según los cánones del etnocentrismo psicoanalítico francés el tema está resuelto: el psicoanálisis americano no ha representado nunca más que una versión del descubrimiento freudiano. Psicoanálisis simplificado, recuperado, medicalizado, normalizador, adaptador, conformista, etc.; en fin, no existen. calificativos suficientemente duros para estigmatizar una traición de la que nos hemos milagrosamente librado gracias al genio de LACAN y sin duda también al genio de nuestra raza. En contrapartida la comprobación de que el psicoanálisis ha sido en Estados Unidos un extraordinario instrumento de integración social y de conformismo político no ha provocado nunca ninguna inquietud si se exceptúan los cánticos en defensa del purismo analítico: eso...