ResumenEn su obra El futuro de la democracia, el célebre teórico político italiano, Norberto Bobbio, reconoce en la virtud, en el amor a la cosa pública, unelemento fundamental de la democracia. Al distinguir entre ciudadanos pasivos y activos, se inclina decididamente por los segundos. Una democracia plena requiere ciudadanos activos que amen la cosa pública y busquen en ella el sentido de su identidad. Pocos pensadores políticos modernos han analizado con mayor profundidad el valor de un ciudadano comprometido en el marco de una esfera pública comprehensiva y plural como Hannah Arendt. Sus ensayos sobre la naturaleza del poder y la política, la autoridad y el totalitarismo, redescubr...