La iconografía de San Juan Bautista de la Concepción es poco diversificada, debido, ante todo, a que su proceso de beatificación progresaba muy lentamente. Tan sólo la proclamación del Reformador venerable servidor de Dios en el año 1760 constituyó una cesura y abrió posibilidades para la creación de muchas interesantes realizaciones artísticas. En la iconografía del Santo predominan las presentaciones en retratos basadas en una imagen que fue pintada aún durante la vida del Religioso y que, en corto tiempo, llegó a conservarse en una copia no muy exacta. Casi todas las imágenes de los siglos XVII y XVIII repetían facciones del retrato cordobés. Otras realizaciones artísticas con más frecuencia presentaban al Santo como místico rezando dela...