La obra presentada atiende a una observación personal entorno al paisaje que, a su vez, está entendido en clave de pintura. La idea de transitar y habitar el paisaje que se representa nos habla casi de manera autobiográfica de ese lugar. Espacios seleccionados por sus condiciones estéticas o emocionales son trabajados siempre con el leitmotiv de prestar al espectador un relato abierto que aporte un clima. De esta forma, se hace especial hincapié en el carácter accidental que tiene la pintura como forma de hablar de esta deriva que se realiza al habitar el paisaje. Se rehúye de una narración cerrada, en favor del propio enigma de la imagen y sus cualidades poéticas. En palabras del escritor chino François Cheng “en la pintura de pais...