Después de la Guerra Civil los suburbios de las grandes ciudades y en concreto los de Madrid, quedaron arrasados y los labriegos que en ese momento poblaban dichas tierras, más desprotegidos que nunca en cuanto a instituciones oficiales y académicas se refiere. Por esto, el Ministerio de Educación Nacional por Orden de 4 de agosto de 1941, constituyó un Patronato de Suburbios encargado de constituir: la Autoridad religiosa con el nombramiento del Obispo de Madrid-Alcalá, D. Leopoldo Eijo y Garay; el Ayuntamiento; el Auxilio Social; la Sección Femenina de F.E.T. y de las J.O.N.S., Médicos, Arquitectos, Inspectores de Primera Enseñanza, Profesores de Normal, Maestros, Ingenieros y todos aquellos profesionales que pudieran aportar sus conocimi...