El vínculo que propone Hannah Arendt entre la política, interpretada como diálogo plural, y la vita activa, conceptualización que rompe con la tradición filosófica, conlleva cierta problematización respecto del cuerpo y la condición humana. Dicho análisis supone la reivindicación de estas categorías con un pronunciado interés por la indignidad que acompaña el funcionamiento del cuerpo y sus necesidades vitales. En este sentido, La condición humana resulta una obra fundamental para repensar el lugar que estos elementos ocuparon históricamente en occidente y el devenir de las actividades asociadas al cuerpo en la modernidad tardía.Fil: Patierno, Nicolas. Universidad Nacional de La Plata. Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación; Arg...