Artículo originalA pesar de que las instituciones democráticas en América Latina se han alternado frecuentemente con regímenes autoritarios, sus características básicas han persistido en los últimos 200 años. Muchas de estas características fundacionales ajustaron modelos usados en otros países a sus condiciones locales, lo que explica en parte su durabilidad. Desde comienzos del siglo XIX hasta finales del siglo XX, la mayoría de las instituciones políticas en Latinoamérica exhibieron constituciones inestables, usualmente con bajo nivel de aplicación, extremadamente centralistas, hiper-presidencialistas, con legislaturas débiles y sin capacidad proactiva, con poderes judiciales conservadores e ineficaces, elecciones contestadas y partidos ...