RESUMEN: Tanto la sociología como la antropología se han enfrentado con problemas ontológicos, epistemológicos y metodológicos similares, procedentes de la aprehensión de su complejo objeto de conocimiento. En términos generales, se han ofrecido dos vías de solución: una objetivista, propugnada por Durkheim, que presupone el carácter fáctico de lo social, y otra nominalista, defendida por Weber y sustentada sobre la teoría de la acción individual. La primera, de índole universalista, tuvo una importante repercusión en los antropólogos más vinculados a la escuela sociológica francesa (Mauss), así como entre los ligados al funcionalismo británico (Malinowski, Radcliffe-Brown y otros) y al estructuralismo (Lévi-Strauss). Progresivamente se pro...