Esta experiencia consiste en que un niño llega a clase con fotos suyas desde que nació y a través de ellas presenta a su familia, muestra el lugar donde vive, habla de sus gustos y aficiones,Es el protagonista de la semana. Su vida personal y cotidiana se convierte, durante cinco días, en el centro de atención del aula. De este modo los niños expresan sus vivencias y sentimientos, se conocen, se relacionan y toman conciencia de aquello que, pese a ser diferentes, tienen en común. La maestra registra los acontecimientos y anécdotas, recopila las aportaciones del protagonista, valora la proyección que tiene en el aula la situación familiar en la que vive o la participación de los otros niños en las actividades. Con todas estas anotaciones ha...