Existen grandes debates en torno al pasado que protagonizan una enorme cantidad de discusiones provenientes tanto del ámbito académico como de la agenda pública. Estos revelan tensiones en relación a la configuración de los relatos del pasado en los que intervienen representaciones históricas que entran en conflicto. La historia se manifiesta así como un terreno inestable en el que entran en pugna distintas memorias que lejos de pretenderse neutrales, se identifican con sensibilidades políticas. Consideraciones en torno a quién, qué y de qué modo las sociedades deben recordar, involucran a su vez otras preguntas: ¿acaso el olvido no forma parte de las operaciones de la memoria? ¿Debería el olvido ser cue...