La cruz de altar se levanta sobre una base circular decorada con palmetas y varias molduras curvas en decreciente. El astil tiene un vástago cilíndrico adornado con una cinta helicoidal de hojas, sosteniendo un gran nudo, en forma de jarrón, con asas vegetales. El cuerpo inferior del nudo está agallonado, teniendo en su centro una cenefa de puntas de sierra. Se remata con una banda cilíndrica con cortinajes y cenefa superior perlada. Sobre éste, un cuerpo troncocónico con gallones que sirve de apoyo a la cruz hexagonal, que sale de un conjunto de hojas de acantos. La cruz presenta en los brazos, en sus lados frontales, motivos de capullos florales. Los brazos se terminan en perillones. En el crucero, óvalo con la cruz de Malta. El Cristo, d...