Verticalmente la cajonería se divide en cuatro cuerpos de cajones, alternando, de abajo a arriba, un cuerpo de un cajón y el siguiente de dos cajones. Todos los cajones tienen (o mejor dicho, tuvieron en origen) dos tiradores y una bocallave. Los grandes se decoran con seis motivos en resalte similar a una corbata de lazo. En el centro, entre dos de estos motivos, se sitúa la bocallave, mientras que los tiradores se situan en el centro de cada uno de los motivos segundos contándose desde el borde del mueble. Los cajones pequeños presentan en su frente un motivo ornamental similar al de los cajones grandes, si bien éste no presenta divisiones y en él, simétricamente, se distribuyen bocallave y tiradores