Se trata de una puerta tapizada en terciopelo rojo, enriquecida con aplicaciones de plata: un marco central que encierra una pintura de un Ecce Homo y unas ricas molduras que enmarcan y resaltan igualmente este motivo central. El marco que bordea exteriormente la puerta se configura mediante una fina moldura exterior recorrida por dentellones y el despliegue de una serie de motivos de rocallas y menudas flores, disponiéndose en sus cuatro ángulos unos tallos vegetales que dinamizan la composición. El marco central que encierra la citada pintura presenta una gruesa moldura central recorrida por hojas trenzadas que configuran un diseño romboidal; pos su parte, la moldura interior de este marco es una sencilla sucesión de motivos semicirculare...