En una cartela perfilada de bordes apergaminados, orla lobulada y remate con venera y alas angelicales, se inserta un medallón oval en el que se representa la figura de medio cuerpo de San Agustín de Hipona. De esplendorosos y llamativos colores son los ropajes que a semejanza de brocados y bordados en oro completan las piezas características de su categoría, esto es, la capa pluvial y la mitra episcopal. Un rostro reflexivo de acusado misticismo reflejado principalmente en los ojos cerrados, no impide observar sin embargo la madurez del santo traducida aquí en una piel arrugada y una escasa barba de tonos blanquecinos. Nuevamente su actitud es la de bendecir a la manera griega con la mano derecha mientras en la izquierda porta la maqueta -...