La cartela que nos ocupa continua la tendencia anteriormente establecida al organizarse en general mediante la disposición de un marco decorativo de abigarradas hojas de acanto y perceptibles elementos tendentes a la rocalla. En esta ocasión, la ornamentación común a todas ellas deja paso a un medallón circular, en el que se representa una clásica lámpara que se asemeja más bien al tipo de vasija antigua. De hecho, con un cuerpo abombado en forma de venera, una tapadera superior ovalada y una agarradera de extremos retorcidos, se adorna perceptiblemente una boquilla de cuello largo de la que surge una llama de fuego, provocando la extensión de fulgurantes rayos lumínicos