Se trata de una toca de sobremanto para la imagen procesional de la Virgen de los Dolores de la Hermandad de las Tres Caídas. Como todas las piezas de esta tipología neobarroca, está concebida como semitransparente (para dejar ver los repetidos bordados en el manto) y decorada por igual. Su forma se compone por un extremo recto, que cae a los lados del rostro de la imagen, y la otra, semicircular al modo de un mantolín, en este caso repitiendo una blonda. Sus bordados recuerdan a los del conjunto procesional, alternando sobre malla de hilos de oro otros de mayor relieve dorado con las sedas vistosas de colores, especialmente verdes, rojizas y celestes. El tema decorativo vuelven a ser los entramados vegetales de gran relieve en el que se su...