Retablo de obra pintado de blanco y dorado al agua. Se estructura en forma de gran arco de medio punto con tres calles, separadas con dos grandes pilastras que lo recorren verticalmente, y cuatro cuerpos. En él se disponen los doce apóstoles pintados sobre lienzo y enmarcados por molduras de yeso doradas. Cada apóstol lleva una cartela con su nombre, borrado en algunos casos, y un párrafo del Credo. En el centro se abre un arco de medio punto que da paso al camarín del Dulce Nombre, abierto en época reciente. El Crucificado arranca del cuarto piso y busca el espacio que se supone destinado al ático debajo de la clave del arco toral. Al igual que los cuadros del apostolado, va encuadrado en una moldura dorada que forma una caja en forma de c...