El personaje cabalga sobre el antebrazo del asiento colocando cada una de sus piernas en un lado. La figura se encuentra vestida con túnica o hábito, que le cubre hasta los pies y con capucha colocada sobre su cabeza. Las manos las sitúa sobre cada una de sus rodillas consiguiendo una actitud de escasa movilidad. Su rostro, pensativo dirige su mirada hacia el frente. Su mano derecha descansa sobre la izquierda a la que apenas roza