La Divina Pastora aparece sentada junto al Niño Jesús. La Virgen está vestida con túnica roja, jubón y manto azul, sosteniendo con la mano izquierda el cayado. Tiene a su izquierda a dos ovejas, una apoya sus patas en su regazo, y la otra agachada lamiendo el pie de la Virgen. A la derecha se encuentra el Niño Jesús abrazado por su Madre, vestido con túnica verde, asiendo con sus manos las patas y la cabeza de una pequeña oveja levantada. A la izquierda aparece un rebaño de ovejas y al fondo el tronco de un árbol bajo el que se encuentra cobijada la Virgen. En el flanco derecho de la composición aparece San Miguel que baja del cielo para luchar contra un dragón que lanza fuego y persigue a una oveja descarriada