Anunciación; Retablo de Nuestra Señora del Rosario

Representación del episodio de la Anunciación de la Virgen María de acuerdo a su figuración iconográfica tradicional, tomada de los Evangelios canónicos (Lc. 1,26-38; Mt 1, 18-21). La disposición de las figuras detona la influencia de grabados flamencos. La Virgen, que se encontraba arrodillada realizando sus oraciones frente a un atril, se vuelve conmocionada para recibir el mensaje divino que le trae San Gabriel. El arcángel irrumpe en una estancia interior y señala con su mano derecha la filacteria en la que aparece inscrita la Buena Nueva. Por último, la paloma (que simboliza al Espíritu Santo por cuya mediación tuvo lugar la Encarnación de María) se dispone en el ángulo superior derecho, contribuyendo a reforzar la diagonal compositiva (de izquierda a derecha) en la que se integran las figuras. Entre la Virgen y el Arcángel se dispone, pintado, el jarrón de azucenas que simboliza la pureza y virginidad de María. Las figuras, a pesar de presentar un correcto tratamiento anatómico, adolecen de cierta inexpresividad en sus rostros. Destaca la policromía de los ropajes, ricamente estofados