Prevalencia de Enfermedad Renal Crónica en pacientes con Diabetes Mellitus, atendidos en el Puesto de Salud Los Ranchones, Granada, Nandaime. II Semestre, 2020

El incremento de la incidencia y la prevalencia de la Diabetes Mellitus (DM) han conllevado a un importe aumento de la enfermedad renal crónica (ERC) como complicación. Lo que obliga a explorar periódicamente la función renal en todos los pacientes con Diabetes Mellitus. Se estima que el 27,9% de los pacientes con dicha enfermedad (DM2) tienen ERC. Esta nefropatía diabética se asocia a un aumento importante de la morbimortalidad cardiovascular. (Fundación RedGDPS, 2018). La detección de la nefropatía diabética junto con la intervención precoz es fundamental para retardar su progresión, acompañando al adecuado control glucémico. La prevención y el manejo de la nefropatía diabética junto con otros aspectos de la atención de la DM es parte de la atención integral de paciente diabético. Los estudios para la detección de la nefropatía en los pacientes con DM deben hacerse anualmente. En las personas con DM tipo 1 (DM1), la pesquisa o el cribado de la nefropatía debe comenzar 5 años después de ese diagnóstico, ya que el momento de su inicio es conocido y las complicaciones microvasculares tardan unos 5 años en desarrollarse. En cambio, en los pacientes con DM tipo 2 (DM2), el cribado debe comenzar al hacer el diagnóstico de DM, ya que a menudo el comienzo de este tipo de DM se desconoce. (Hahr & Molitch, 2015). En Nicaragua según el mapa actual de salud del MINSA la DM ocupa el segundo lugar de las 12 principales causas de morbilidad con 111,906 personas que la padecen y la enfermedad renal crónica ocupa el séptimo lugar con 19,971 individuos. Los egresos hospitalarios desde el 2017 hasta 2020 por ERC están en cuarto lugar con 2931 casos y se encontró que durante este periodo ha habido 1317 fallecidos por ERC siendo un tercio derivado del padecimiento de diabetes. (MINSA-Nicaragua, 2020