El cuerpo humano no es solamente una entidad biológica regida por leyes naturales, ni simplemente el conjunto de órganos y huesos que lo constituyen. De forma fundamental, los cuerpos son, a la vez, contenedores de percepciones y significados, un medio de expresión y un lugar de intervención, control y domesticación. Es en ellos donde saberes, culturas y poderes confluyen y se expresan. Así lo han entendido un gran número de trabajos que desde las ciencias sociales han convertido al cuerpo humano en campo privilegiado de estudio. Hace ya casi 20 años que el historiador de la medicina Roy Porter señalaba las enormes oportunidades analíticas e interpretativas que el estudio del cuerpo ofrecía. Porter destacaba el necesario carácter interdisci...