El concepto moderno de historia y su ambivalencia hace posible un acercamiento al problema de las representaciones del hombre y del tiempo. Este carácter adquiere relieve en las reflexiones sobre la Histórica llevadas a cabo por Koselleck, en las que pasado y futuro se vuelven problemáticos y crean la necesidad de una metodología idónea para su comprensión. Esta metodología, fundada en las categorías de espacio de experiencia y horizonte de expectativa, termina perfilando, a través de la metáfora temporal de los estratos del tiempo, las relaciones del historiador frente a la historia, en tanto escenario estratificado del trilema de la interpretación histórica y marca la pauta para la pregunta por su interpretación bajo la óptica de la simul...