Espacio público y vendedores informales afrocolombianos en Cali, Colombia

25.5% of all African descendants in Colombia reside in the city of Cali representing 26% of the total population of the city. In this way, Cali is one of the cities with the highest Afro-Colombian population in the country. The city has been the principal center of attraction for migrant populations from the South Pacific Coast of Colombia in which the Afro-Colombian population is prevalent. These regions are the poorest in the country. Informal vending in Cali is carried out primarily by rural and/or internally displaced migrants. In this paper, I am interested in finding out if Afro-Colombians endure a higher marginality and discrimination rate as street vendors than the self-identified mestizos and white or if, on the contrary, both groups face similar levels of discrimination. Thus, I intend to find out if black bodies are marked by discourses of undesirability and crime in public spaces in Cali. Additionally, informal street vending is understood by urban scholars as well as the government of Cali as a class struggle. This understanding effectively deracializes the informal vending landscape, while also reifying the invisibility of black racialized bodies in equality discourses. Many authors claim that the current problem in Colombia of recognizing the diverse racial composition of informal vendors and understanding these struggles only through class impedes a well thought out discernment of the social and economic realities faced by racialized bodies in public spaces.El 25.5% de todos los afrodescendientes en Colombia residen en la ciudad de Cali, lo que representa el 26% de la población total de la ciudad. De esta manera, Cali es una de las ciudades con mayor población afrocolombiana del país. La ciudad ha sido el principal centro de atracción para las poblaciones migrantes de la costa del Pacífico Sur de Colombia en la que prevalece la población afrocolombiana. La venta informal en Cali es llevada a cabo principalmente por migrantes rurales y/o desplazados internos. En este artículo, me interesa saber si los afrocolombianos sufren una mayor marginalidad y discriminación como vendedores ambulantes que los auto identificados como mestizos y blancos o si, por el contrario, ambos grupos enfrentan niveles similares de discriminación. Por lo tanto, propongo averiguar si los cuerpos negros están marcados por discursos de indeseabilidad y crimen en los espacios públicos de esta ciudad. Adicionalmente, este fenómeno es entendido por los académicos urbanos, así como por el gobierno de Cali como una lucha de clases. Esta comprensión ratifica la invisibilidad de los cuerpos racializados negros en los discursos de igualdad. Muchos autores afirman que el problema actual en Colombia de reconocer la composición racial diversa de los vendedores informales y entender estas luchas sólo a través de las clases impide un discernimiento bien pensado de las realidades sociales y económicas que enfrentan los cuerpos racializados en los espacios públicos.El 25.5% de todos los afrodescendientes en Colombia residen en la ciudad de Cali, lo que representa el 26% de la población total de la ciudad. De esta manera, Cali es una de las ciudades con mayor población afrocolombiana del país. La ciudad ha sido el principal centro de atracción para las poblaciones migrantes de la costa del Pacífico Sur de Colombia en la que prevalece la población afrocolombiana. La venta informal en Cali es llevada a cabo principalmente por migrantes rurales y/o desplazados internos. En este artículo, me interesa saber si los afrocolombianos sufren una mayor marginalidad y discriminación como vendedores ambulantes que los auto identificados como mestizos y blancos o si, por el contrario, ambos grupos enfrentan niveles similares de discriminación. Por lo tanto, propongo averiguar si los cuerpos negros están marcados por discursos de indeseabilidad y crimen en los espacios públicos de esta ciudad. Adicionalmente, este fenómeno es entendido por los académicos urbanos, así como por el gobierno de Cali como una lucha de clases. Esta comprensión ratifica la invisibilidad de los cuerpos racializados negros en los discursos de igualdad. Muchos autores afirman que el problema actual en Colombia de reconocer la composición racial diversa de los vendedores informales y entender estas luchas sólo a través de las clases impide un discernimiento bien pensado de las realidades sociales y económicas que enfrentan los cuerpos racializados en los espacios públicos