La elección de Brasil del 2010: opinión pública y comunicación

In 2010, Dilma Rousseff, cadidate of the Workers Party (PT), was the winner of presidential elections. President Lula’s popularity and mass media were two of the most important factor that determined the electoral result. This article analyzes the reasons that Brazilian citizens had to vote, taking as reference public opinion’s concept developed by Giovanni Sartori.The author affirms that electoral decisions are not only explained by the influence of images and vain promises of candidates; proving that things such as identity, social and cultural characteristics of electoral segments acquired a big importance in the Brazilian electoral process. The purpose of this article is to set how 2010 presidential elections in Brazil is articulated to a group of communicative forms and schemes that pretend to establish how PT’s candidate is a Lula’s continuity and how Serra, his opponent even when he doesn’t try to deny PT government, sets out to do a better one.En las elecciones presidenciales del 2010 en Brasil, la candidata del Partido de los Trabajadores (PT), Dilma Rousseff, obtuvo la victoria. La popularidad del presidente Lula y de los medios de comunicación fueron dos de los factores que determinaron el resultado electoral. El presente artículo analiza las razones que orientaron el voto de los ciudadanos brasileños, tomando como referencia el concepto de opinión pública desarrollado por Giovanni Sartori. El autor plantea que la decisión electoral no se halla exclusivamente sometida a la influencia de las imágenes y promesas vanas de los candidatos, demostrando que cuestiones como la identidad y las características socioculturales de los diferentes segmentos adquirieron gran relevancia en el proceso electoral de Brasil. El propósito del presente artículo es plantear cómo la elección presidencial de 2010 en Brasil está articulada a un conjunto de formas comunicativas y esquemas que pretenden establecer cómo la candidata del PT es una continuidad de Lula y cómo Serra, su oponente, aun cuando no procure negar el gobierno petista, plantea realizar uno mejor