El artículo procura mostrar que la situación de violencia que se presenta a inicios del Siglo XXI en América Latina es un fenómeno novedoso desde el punto de vista sociológico, tanto por el crecimiento en sus magnitudes, como por lo singular de sus características. Se trata, argumenta el autor, de una violencia que no tiene orígenes o propósitos políticos, sino sociales y está vinculada al proceso de empobrecimiento que ha tenido la región a partir de los años ochenta y que ha creado unas condiciones de exclusión educativa y laboral para una gran parte de la población. Esta nueva violencia afecta fundamentalmente a los jóvenes de la segunda generación urbana quienes están expuestos a unas altas expectativas de consumo que no pueden satisfac...