La doctrina cultural del realismo socialista fue aprobada por el Partido Comunista de la Unión Soviética e incorporada a la política oficial del gobierno soviético tras la realización en 1934 del Primer Congreso de la Unión de Escritores Soviéticos. Por su intermedio se establecían los parámetros metodológicos y estéticos a los que debía atenerse toda producción artística dentro de la Unión Soviética. A partir de entonces, cualquier posibilidad de independencia relativa de la cultura y el arte en relación a la política oficial quedaba severamente cuestionada. Esta situación de subordinación se producía en tiempos en que la Tercera Internacional comenzaba a abandonar la táctica de clase contra clase para pasar a volcarse a la conformación de...