En el presente trabajo se reflexiona sobre algunas de las consecuencias de la residencia parisina de Julio Cortázar. Abordamos brevemente cómo fue aceptada o criticada esta decisión de marcharse a París, en 1951. Dicho exilio voluntario fue considerado, por algunos, una traición al compromiso nacional que se le exige a los autores latinoamericanos. Reflexionando sobre cuáles podrían ser algunas de las señales de dicha “argentinidad”, terminamos concluyendo hasta qué punto la propia ida hacia este país europeo y la opción de vivir lo latinoamericano “desde lejos” no supone ya una elección radicalmente coherente con la poliédrica identidad argentina y su necesidad de cuestionamiento y búsqueda.This work reflects on some of the consequences of...