Modelación de calidad del aire como herramienta de ajuste de inventarios de emisiones

La contaminación del aire es una gran preocupación en Bogotá, donde las concentraciones de PM10 y PM2.5 con frecuencia superan los valores normativos. Los inventarios locales de emisiones muestran que el material particulado resuspendido (RPM) es una fracción importante de las emisiones de PM, superando en masa las emisiones por combustión de fuentes móviles y fijas. Sin embargo, ejercicios previos de modelación de calidad del aire en Bogotá han señalado una sobreestimación de las concentraciones de PM probablemente debido a las emisiones de RPM estimadas usando la metodología EPA AP-42. En este trabajo, resumimos nuestros esfuerzos para actualizar el inventario de emisiones RPM usando la metodología desarrollada por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) de España, la cual determina factores de emisión para RPM de cargas de sedimentos menores a 10 micrómetros (RD10) en vías pavimentadas. La aplicación de la metodología CSIC genera reducciones del RPM proveniente de vías pavimentadas del 90% con respecto a la aplicación del método AP-42 de la EPA. La desagregación espacial de este inventario presentó las emisiones de mayor magnitud de PM10 en la zona occidental y suroccidental de la ciudad, zonas donde se presentan las mayores concentraciones de PM10. Al aplicar este inventario actualizado de emisiones RPM junto con las demás fuentes, en el modelo de calidad del aire CMAQv5.0.2 se observa un mejor ajuste en las concentraciones ambientales de PM, corrigiendo el problema de la sobrestimación inicial. Los resultados modelados presentan un buen desempeño estadístico para el periodo húmedo de simulación y una subestimación en el periodo seco. Además, se obtienen mejores representaciones de la composición química del PM10. De esta forma, la modelación de calidad del aire en Bogotá ha permitido revisar y actualizar los inventarios de emisiones, herramienta que no existía en el pasado y donde los inventarios eran evaluados comparando entre un año y otro. Para Colombia, es importante contar con ejercicios de modelación regionales que permitan evaluar inventarios de emisiones