Línea 9. Un reto técnico y financiero

Alcanzar un nivel de financiación estable y adecuado para el transporte público en las ciudades es una cuestión que a lo largo de la historia ha ido adquiriendo gran relevancia en los programas de los principales responsables y autoridades del transporte público. Despúes de un periodo de estancamiento, la demanda de transporte público ha experimentado un crecimiento considerable en muchas ciudades del mundo. Naturalmente, esta mayor demanda requiere de un aumento de los niveles de capacidad del transporte público. Además, también se han visto incrementadas las expectativas de los ciudadanos respecto a la posibilidad de elección y a la calidad de los servicios. Para abordar todos estos condicionantes y requisitos, es necesario no solo invertir en nuevos proyectos de infraestructuras del transporte público sino también confeccionar estrategias que abogen por una inversión racional des del punto de vista técnico, social y financiero. La coyuntura económica actual ha interferido en la dinámica de crecimineto del sector del transporte público. En un contexto en el que la prioridad de los gobiernos es la racionalización de las balanzas públicas y en el que falta confianza en los mercados de capital, el transporte público se enfrenta a unos recortes importantes, que no solo hacen peligrar los planes de desarrollo, sino incluso la propia explotación cotidiana de éste. Esta tesina pretende, por una parte adentrarse en los conceptos más generales relacionados con el funcionamiento del sistema actual del transporte público y en la definición de un buen modelo de financiación, así como en los conceptos que rodean el funcionamiento de los modelos de colaboración público-privada y el papel que éstos pueden jugar en la gestión y financiación del transporte público urbano. Por otro lado, a través del estudio y valoración del modelo de financiación de la Línea 9 de Metro de Barcelona, pretende abordar las principales ventajas e inconvenientes de la incorporación del sector privado en la financiación y gestión del proyecto, y formular una serie de recomendaciones de mejora para futuros proyectos de transporte público urbano similares a la Línea 9. De acuerdo con el estudio realizado acerca de la Línea 9 se puede constatar que las principales ventajas de la participación del sector privado en el proyecto recaen en la posibilidad de liberar recursos públicos, la obtención de liquidez por parte de la Administración y la incorporación de mayores capacidades para gestionar los riesgos que puedan afectar al proyecto. En cuanto a los principales inconvenientes destacar los sobrecostes causados por la obtención de capital en esquemas de colaboración público-privada y por las primas que la Administración deberá pagar por la no asunción de riesgos. Por último, destacar la importancia de realizar evaluaciones completas de los riesgos geológico-geotécnicos y de la viabilidad financiera de los proyectos para evitar posibles sobrecostes. También es importante estudiar fuentes de financiación alternativas para hacer frente a los costes de ejecución y explotación de los proyectos, así como implementar medidas que aumenten la concurrencia de ofertantes en los procesos de licitación