Batería de evaluación para niños disfásicos

Tesis (Fonoaudiología)El lenguaje es uno de los instrumentos cognitivos básicos para el desarrollo psicosocial del individuo. Está formado por un conjunto completo de diferentes aspectos que permiten una comunicación eficaz: la fonología, la semántica, la morfosintaxis y la pragmática. La pragmática del lenguaje es con seguridad el aspecto menos conocido y más tardíamente estudiado por la lingüística. Se suele definir desde la vertiente expresiva y resulta ser una visión muy incompleta. Se dispone de muy pocos datos de su desarrollo en niños, debido a que se va adquiriendo progresivamente a los largo de muchos años. Una de las patologías paradigmáticas caracterizadas por déficits en todos los aspectos del lenguaje, especialmente en la pragmática, es sin duda el Trastorno Disfásico. Los autores no han llegado a un consenso con respecto a la definición de este, ¿Es un trastorno del Lenguaje Severo o es un Trastorno de la Comunicación y Relación? En la actualidad, se desconocen baterías, protocolos o instrumentos de evaluación únicos para el Trastorno Disfásico. En Chile, las normas vigentes rigen el ingreso de niños con NEE (Necesidades Educativas Especiales) a educación especial mediante un Formulario Único de Ingreso para niños Disfásicos, establecido por el decreto supremo Nº170/2009, el cual no contempla una pauta o batería para determinar las características comunicativas lingüísticas, sino que es llenado por medio de las pruebas estandarizadas aplicadas para el diagnóstico de TEL. Por lo tanto, se hace necesaria la creación de una Batería Específica de Evaluación para niños Disfásicos. El presente trabajo tiene como objetivo la creación de un instrumento de evaluación clínico para niños diagnosticados con Disfasia. Pretende ser un material de apoyo en el área de la Fonoaudiología, al momento de realizar el llenado del Formulario Único, el cual se aplica actualmente en Chile para el ingreso y reevaluación de niños con el Trastorno a Escuela Especial. De esta manera homogenizar el registro llevado a cabo por el profesional Fonoaudiólogo competente en el área de lenguaje, comunicación e interacción social, ya que es necesario unificar criterios de los profesionales de esta área, para así poder elaborar posteriormente una intervención ajustada a las características de estos niños