Para poder materializar la noción abstracta de dignidad humana, se deben incorporar al discurso conceptos nuevos y emergentes que, en ocasiones retomando tesis pasadas, ayuden a la reformulación conjunta de los valores liberales ilustrados de dignidad. Se trata de equilibrar la dimensión individual y social. En concreto, en este trabajo, se sugiere que para poder reconducir un diálogo interno y social sobre uno de esos valores, el de libertad, se requiere entender que los individuos no fraguan una idea del bien y la vida buena (lo que sea una vida digna o dignidad humana) de manera autosuficiente. Así, se debe entender que no hay libertad sin autonomía relacional. En esta línea se hacen converger las propuestas sobre la autonomía como capa...