Estimulación eléctrica y modulación de circuitos espinales en la organización del movimiento

La plasticidad en el sistema nervioso ha sido ampliamente estudiada y se han descrito en profundidad los cambios necesarios para producir plasticidad a corto plazo y plasticidad a largo plazo. Se han desarrollado técnicas no invasivas que producen cambios plásticos en la corteza cerebral tanto con corriente directa como con estimulación magnética. Diferentes protocolos han mostrado efectos moduladores. De este modo, se ha demostrado que la estimulación repetida permite aumentar o disminuir la excitabilidad de grupos de neuronas, en función de si esta estimulación es de alta o baja frecuencia respectivamente. La estimulación con protocolos Thetaburst ha demostrado cambios más duraderos y con menor tiempo de estimulación. En esta trabajo se ha pretendido trasladar esta estimulación Thetaburst con efectos en la corteza a su utilización en la médula espinal a través de la estimulación periférica del nervio tibial posterior. Para ello se aplicó la estimulación TBS en el nervio tibial posterior y se midió el reflejo H de forma basal (T0), al terminar la estimulación (T1) 15 minutos después (T2) y 30 minutos después (T3). Para discernir los efectos de la estimulación se realizaron tres experimentos en los que se varió el tiempo de estimulación (5, 20, 40 y 300 segundos) así como la intensidad que podía ser baja (intensidad al umbral sensitivo) o alta (110% intensidad al umbral de la onda H). Y se midieron los cambios a través del reflejo H, utilizando para ello la ratio H/Mmáx. También se midieron los efectos sobre la inhibición presinaptica a través de la estimulación con pulsos pareados (ration H2/H1) Los resultados mostraron que el patrón Thetaburst es eficaz en la producción de cambios plásticos mientras que otros estímulos sin este patrón rítmico sino con frecuencia constate (15Hz) no consiguen modular el umbral de las motoneuronas espinales. Para que el patrón Thetaburst produzca cambios debe ser aplicado a intensidad elevada. Ninguno de los protocolos produjo efectos sobre la ratio H2/H1