Procesado de neuroimágenes SPECT y PET para el análisis de pacientes pediátricos con epilepsia farmacorresistente

La epilepsia es una enfermedad que afecta anualmente a 2,4 millones de personas en todo el mundo, de entre las cuales, un 30-40% no responde al tratamiento farmacológico, lo que se conoce como epilepsia farmacorresistente. En estos casos, se procede al estudio detallado del paciente, por medio de técnicas híbridas de imagen: Tomografía Computarizada por Emisión de Fotones Simples (SPECT), Tomografía por Emisión de Positrones (PET) y Resonancia Magnética Nuclear (RMN), con el objetivo de practicar una neurocirugía para extirpar el inicio de la lesión, el foco epileptógeno (FE). Actualmente, la práctica clínica utiliza la técnica SISCOM (Substracción de la SPECT interictal e ictal y corregistro con RMN) para la localización del FE. Por otro lado, la investigación clínica está trabajando en una nueva técnica, la PISCOM (Substracción de la PET interictal y SPECT ictal y corregistro con RMN), que utiliza una PET interictal en lugar de una SPECT, introduciendo nueva información como el consumo cerebral de glucosa. El objetivo principal de este proyecto es obtener una aplicación para la implementación de la técnica PISCOM en pacientes con epilepsia farmacorresistente. Para ello se propone el desarrollo de un sistema que permite la integración de la aplicación en una única plataforma y un nuevo método de procesado de la imagen PET interictal, consiguiendo una imagen PET degradada comparable con la SPECT ictal. Se han estudiado 10 pacientes adultos y 9 pacientes pediátricos con las técnicas SISCOM, PISCOM y la nueva aplicación propuesta para la PISCOM, comparando los resultados obtenidos visualmente, y con la localización exacta del FE extirpado mediante neurocirugía. Se comprobó que los resultados obtenidos con la aplicación diseñada para la PISCOM eran similares a los obtenidos con los métodos anteriores, tanto en pacientes adultos como en pediátricos. Además, este nuevo proceso permite una mejor localización del FE, lo que podría contribuir a una mejora en la práctica clínica, una vez sea validado con un mayor número de pacientes