EL DELITO DE ROBO COMETIDO POR UN ASCENDIENTE CONTRA SU DESCENDIENTE O POR ESTE CONTRA AQUEL.

Toda sociedad rige su vida colectiva por un cuerpo de leyes, cuyo cumplimiento es obligatorio, para todos sus miembros; leyes basadas en principios morales, religiosos. Educativos y en sus costumbres, que influyen en el desenvolvimiento de ésta, según sus tradiciones, sus características tipificantes y su idiosincrasia. En la sociedad no faltan individuos que, por una u otra circunstancia, vulneran las disposiciones legales, unas veces premeditadamente y otras culposamente. A los que violan la Ley, se les aplica las sanciones que la misma señala; sanciones que tienen asignadas cierta escala de rigor acorde a la intensidad del delito, condición moral del delincuente grado de intención delictiva, y otros factores que pueden influir en la comisión del ilícito. Para aplicar la pena impuesta por el juzgador a quienes delinquen, existen centros de readaptación en los que se paga con la privación de la libertad, la falta cometida. En dichos establecimientos son recluidos, los delincuentes peligrosos y los ocasionales, estos últimos que por circunstancias fortuitas, los condujeron a transgredir las leyes. El Código Penal vigente en el estado de Michoacán contempla y sanciona a través de su catalogo de delitos las conductas antijurídicas de la sociedad en general, los Diputados y Senadores al legislar en materia penal buscaron un equilibrio entre los delitos y las sanciones para lograr una armonía social, pero a pesar de eso existen lagunas en la ley que es urgente legislar para dar mayor certeza y seguridad jurídica a las personas, un caso concreto es el delito de Robo cometido por un ascendiente contra un descendiente o por éste contra aquel, delito que en el Código Penal para el Estado de Michoacán en su artículo 308 señala una excusa absolutoria a favor del ascendiente o descendiente que cometa este delito