Modelo de desarrollo económico y deuda pública de República Dominicana. Conceptos sobre el cambio y las reformas necesarias

Antonio Ciriaco Cruz (biografía): Realizó una Licenciatura en Economía en la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), así como una Maestría en Economía Aplicada, con concentración en Macroeconomía y Economía de la Producción, en el Colegio de Postgraduados de México. Su Doctorado en Economía de Desarrollo y Modelización Económica, fue cursado en la Universidad Autónoma de Madrid (UAM). También posee una especialización en Estadística Multivariante, programa coordinado por la Universidad Complutense de Madrid (UCM) y la Universidad de Educación a Distancia (UNED). Ha realizado y participado en importantes investigaciones nacionales e internacionales, y posee amplia experiencia en actividades académicas de investigación en las áreas de macroeconomía y desarrollo, agropecuaria, comercio internacional y negociaciones comerciales. Es articulista regular del periódico El Día y dirige el Instituto de Investigaciones Socioeconómicas (INISE). ///// Reinaldo Ramón Fuentes Plasencia (biografía). Es profesor de Historia y Ciencias Sociales y experto en metodología. Realizó una Maestría en Administración de Empresas y un Doctorado en Ciencias Económicas. Es profesor investigador de la Universidad de La Habana y de dos de sus principales centros: el Centro de Investigaciones de la Economía Internacional (CIEI) y el Centro de Estudios de la Economía Cubana (CEEC). Ha cursado 15 programas de posgrado y publicado 29 trabajos. Ha participado en innumerables eventos científicos nacionales e internacionales y ha sido reconocido y premiado en diversas ocasiones. Es coautor de dos libros y se ha desempeñado como consultor internacional. Tiene una amplia experiencia en la conducción de investigaciones en los países de la Europa del Este, en particular con relación a la antigua URSS. En República Dominicana se ha desempeñado como profesor en varias universidades.La tesis de este trabajo es que el endeudamiento público de República Dominicana en los últimos años ha obedecido, no a una coyuntura, sino a una situación estructural: al no haber un espacio fiscal que procure los recursos que demandan el crecimiento económico y el desarrollo dominicanos, estos se han venido alimentando con el aumento de la deuda. A juicio de los autores, se debería seguir un esquema similar al que han aplicado los llamados “tigres asiáticos” (Corea del Sur, Taiwán, Singapur y Hong Kong), de modo que el crecimiento productivo y exportador se base en un mejoramiento real de la capacidad tecnológica del país, en una integración e interconexión de sus diversas industrias nacionales y en un mejoramiento de su entorno empresarial y clima de negocios, a partir sobre todo de la consolidación del estado de derecho, el cese de la corrupción e impunidad gubernamentales y el fortalecimiento institucional del Estado. Para el desarrollo productivo y nacional sería necesario y fundamental una reforma educativa que ponga el acento en la calidad (de los profesores, del proceso de enseñanza-aprendizaje, de la investigación) y en la consecuente transformación de la sociedad dominicana en un espacio de innovación y creación. Por supuesto, ante todo se requeriría entender que cualquier proyecto nacional de desarrollo que se perfile debe caracterizarse por su inclusión de las mayorías y por su equidad