Prima facie, el pensamiento de Plotino parece incompatible con una valoración positiva de la realidad sensible. En la segunda mitad del tratado II 4 (12), el filósofo neoplatónico expone la naturaleza de la materia sensible y la presenta como el mal, la indeterminación, el no-ser y la privación. En II 5 (25) continúa en esta misma línea y añade que esa materia es una potencia que nunca llegará a ser acto. En III 6 (26) se ocupa de su carácter impasible. En I 8 (51) afirma que los seres sensibles son males "segundos" que "participan" del primero (es decir, la materia sensible). Sin embargo, en otros tratados como IV 8 (6) y II 9 (33) el Licopolitano señala que el mundo sensible merece ser reivindicado en tanto alberga una "huella" o un "rast...